El acoso laboral es una de las experiencias más difíciles que puede afrontar un trabajador en su entorno profesional. Conocer qué conductas constituyen acoso es fundamental para poder defenderse en caso de verse afectado por este tipo de situaciones. Si estás atravesando esta problemática, contar con el apoyo de un abogado laboralista en Palma de Mallorca es fundamental para conocer tus derechos y tomar las medidas legales adecuadas.
En nuestro despacho de abogados en Palma de Mallorca encontrarás el respaldo necesario para afrontar conflictos de carácter laboral y proteger tu integridad como trabajador.
¿Qué es el acoso laboral?
El acoso laboral hace referencia a un conjunto de conductas reiteradas y hostiles dirigidas a un trabajador con el objetivo de menospreciarlo, humillarlo o aislarlo. Estas acciones afectan tanto su dignidad personal como su salud y situación profesional, generando un ambiente intimidante o degradante dentro del lugar de trabajo.
Ejemplos comunes de acoso laboral
- Reprender constantemente al trabajador en público con comentarios despectivos.
- Insultar, gritar o emitir críticas injustificadas de manera continua.
- Difundir rumores falsos sobre su vida privada o desempeño laboral.
- Excluirlo de reuniones o dejarlo sin funciones asignadas.
- Imponer tareas imposibles de cumplir o carentes de sentido.
- Apropiarse de sus logros o culparlo de errores ajenos.
- Realizar burlas o comentarios ofensivos sobre religión, raza, sexo u orientación sexual.
- Negarle ascensos, formación o adaptaciones necesarias con la intención de perjudicarlo.
- Ejercer amenazas, violencia o presiones para evitar que reclame sus derechos.
- Tomar represalias contra quienes presentan denuncias o colaboran en reclamaciones.
Condiciones para considerar acoso laboral
No todo conflicto en el ámbito de trabajo constituye acoso. Para que estas conductas sean reconocidas legalmente como tal, deben producirse de manera repetida en el tiempo y generar un entorno hostil o humillante. En los casos en que provienen de un superior, podrían incluso tipificarse como delito según el Código Penal español.
No se consideran acoso laboral los hechos aislados, las discusiones puntuales ni las sanciones justificadas por incumplimientos reales y documentados.
Pruebas para demostrar el acoso laboral
Para demostrar legalmente que se sufre acoso laboral es imprescindible reunir pruebas directas y claras que acrediten las conductas hostiles y sus consecuencias.
Tipos de pruebas válidas
- Correos electrónicos, mensajes de WhatsApp, SMS u otras plataformas en los que aparezcan insultos, amenazas, menosprecios o evidencias del acoso.
- Grabaciones de conversaciones entre el acosador y la víctima, siempre que sean legales en la comunidad autónoma correspondiente y la víctima participe en la grabación.
- Testimonios de compañeros de trabajo, clientes o proveedores que hayan presenciado el acoso o los hechos.
- Informes médicos o psicológicos que acrediten daños en la salud física o mental provocados por el acoso (ansiedad, depresión, bajas laborales, etc.).
- Fotografías, vídeos o actas de reuniones donde se reflejen conductas de aislamiento, humillación o discriminación.
- Un diario personal detallado con fechas, hechos y consecuencias, que ayude a contextualizar el desgaste y la reiteración de las conductas.
¿Y el acoso sexual laboral?
No se incluyó el acoso sexual en la respuesta anterior porque, aunque el acoso sexual es uno de los tipos más graves y específicos de acoso laboral, suele tratarse en apartados diferenciados por su regulación, tratamiento legal y sus propias características, distinguiéndose del acoso psicológico o mobbing convencional.
¿Qué es el acoso sexual laboral?
El acoso sexual en el trabajo se define como cualquier comportamiento, verbal o físico, de naturaleza sexual, no deseado y que tenga el propósito o produzca el efecto de atentar contra la dignidad de una persona, en particular cuando se crea un entorno intimidatorio, hostil, degradante u ofensivo. Ejemplos comunes son:
- Comentarios, bromas, insinuaciones o proposiciones de contenido sexual.
- Solicitudes de favores sexuales, explícitas o implícitas, relacionadas con el trabajo.
- Contacto físico no consentido, gestos obscenos, mostrar material pornográfico o realizar gestos de connotación sexual.
- Amenazas, presiones o represalias por rechazar avances de carácter sexual.
Regulación legal
El acoso sexual está prohibido y penado por el Código Penal español (artículo 184), así como por la Ley Orgánica 3/2007. La denuncia y prueba de acoso sexual sigue circuitos formales similares al acoso laboral general, pero las conductas de naturaleza sexual adquieren especial gravedad y pueden derivar en responsabilidad penal, administrativa y civil para el acosador y su empresa si no lo impide.
En resumen, el acoso sexual laboral es un subtipo de acoso en el entorno profesional que implica una motivación y una regulación específica, por lo que suele explicarse aparte para garantizar profundidad y claridad en la información ofrecida.
Pasos para denunciar acoso laboral en España
Para denunciar acoso laboral en España, existen diferentes vías y un procedimiento esencial que debe seguirse para asegurar la protección de los derechos del trabajador y lograr una sanción efectiva contra los responsables.
Pasos para denunciar
- Recoge pruebas sólidas y organiza los hechos: documenta correos, mensajes, testigos, partes médicos, grabaciones legales e informes de recursos humanos, con fechas y consecuencias.
- Comunica primero el acoso dentro de la empresa: por escrito a recursos humanos, supervisores o comité sindical. Puede hacerse mediante email con acuse de recibo, burofax o a través del delegado sindical.
- Si la empresa no actúa: presenta denuncia ante la Inspección de Trabajo y Seguridad Social. Esta vía es confidencial y puede derivar en sanciones administrativas.
- Demanda judicial: también es posible acudir al Juzgado de lo Social con el respaldo de un abogado especializado. Se puede reclamar la extinción del contrato con indemnización, daños morales o la nulidad del despido en caso de represalias.
Otras consideraciones importantes
- El plazo general para presentar una demanda laboral es de un año desde el último acto de acoso. El plazo penal puede llegar hasta cinco años, según la gravedad.
- En juicio, es posible solicitar medidas cautelares, como cambios de puesto, reducción de jornada o traslado para proteger la salud del trabajador.
- Si existen daños psicológicos o médicos, es recomendable solicitar parte médico y apoyo profesional, tanto para acreditar el daño como para iniciar la recuperación.
- Denunciar cuanto antes y con asesoría legal especializada aumenta las probabilidades de éxito y de protección frente a represalias.
Cómo puede ayudarte un abogado especializado
Un abogado laboralista en Palma de Mallorca puede asesorarte sobre las pruebas necesarias, guiarte en el proceso de denuncia y representarte ante la empresa o tribunales si es necesario. Actuar a tiempo es clave para frenar estas conductas y garantizar la protección de tus derechos como trabajador.
Si te encuentras en una situación de acoso laboral, en abogado en Palma de Mallorca ponemos a tu disposición la experiencia y cercanía de un equipo profesional que te acompañará en cada paso del proceso.



